La compañía aérea Ryanair ofreció vuelos gratis a quienes acudieran a la Plaza de Cataluña, de Barcelona, con pancartas en las que expresaran su preferencia por esta empresa frente a su competidora, Iberia. Fue tal el éxito de la promoción, que cuando la gente de Ryanair se disponía a repartir los regalos, la multitud se abalanzó sobre ellos y la policía tuvo que intervenir.
La campaña contra Iberia se transformó en una campaña contra Ryanair. El público protestó contra Ryanair y presentó sus quejas ante la Agencia Catalana de Consumo. Esta ha abierto un expendiente que podría costarle a la compañía aérea de bajo coste hasta 600.000 euros. A lo que hay que sumar los daños causados a su propia imagen. Compuébalo.
Moraleja: cuando te plantees una promoción, mide bien los probables resultados. Pon límites claros a la promoción o el tiro puede salirte por la culata.
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