Aquella pequeña empresa hizo un enorme esfuerzo para atraer la atención de los medios de comunicación y de los potenciales clientes. Gracias a ello, miles de personas intentaron acceder a su web…pero no lo consiguieron.
Se trata de un problema que es más frecuente de lo que podría parecer: no estamos preparados para el éxito.
Puede ser porque nuestra web no esté preparada para recibir una avalancha de visitas.
O porque nuestra empresa no esté preparada para recibir una enorme cantidad de pedidos.
O por otras razones.
El caso es que despertamos expectativas que no estamos preparados para satisfacer.
Y así, el éxito puede convertirse en un terrible fracaso.
Por eso, cuando preparamos una promoción, es fundamental que nos preparemos para el éxito.
¿Te gusta este artículo?
Entonces suscríbete a nuestro boletín y recibirás gratis información premium para tu negocio y ofertas exclusivas.