El 22 de mayo os contábamos que un cliente, al solicitarnos un diagnóstico gratuito de identidad corporativa, descubrió que otra empresa había registrado su marca. ¿Cómo pudo suceder algo así?
Se trata de un problema bastante frecuente. El propietario de la marca no contaba con ningún sistema de vigilancia. La Oficina española de Patentes y Marcas tramitó el nuevo registro para una clase (es decir un uso según la clasificación de Niza) diferente a la ya registrada y, al no existir oposición alguna durante dos meses, la aceptó.
¿Cómo evitarlo? ¿Cómo proteger tu marca?
Con una vigilancia constante. Comprobando cada nueva solicitud de registro y cotejándola con la marcas que ya tenemos registradas. Es una tarea costosa, pero sólo así podremos oponernos a un nuevo registro para proteger nuestros intereses. Es lo que hacemos en nuestra empresa, contamos con partners especializados que efectúan el registro y mantienen GRATIS esa vigilancia constante durante diez años. Si aparece una solicitud de registro que pueda ir en contra de los intereses de nuestros clientes, inmediatamente les informamos para que puedan protegerse, oponiéndose al nuevo registro.
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