Cada día hay más gente harta de los políticos de siempre, de los bancos de siempre, de las empresas de siempre y cada día hay más gente buscando proveedores diferentes, comprometidos, solidarios, rebeldes.
Empresas sin corbata y sin letra pequeña. Empresas que favorezcan el consumo colaborativo. Empresas que hagan más por el cuidado de nuestro planeta que llamar a sus productos verdes, eco o bio.
Empresas que no busquen ganar dinero a toda costa y que también se ocupen y se preocupen por la gente.
Empresas rebeldes que traten a sus clientes como personas inteligentes.
Hay más rebeldes de lo que parece
¿Crees que es una impresión mía o que son muy pocos?
A los datos me remito. Fíjate, esto empezó hace ya años:
Entonces Google publicó los diez principios en los que basaba su política empresarial y entre ellos estaban:
- Piensa en el usuario y lo demás vendrá solo.
- Se puede ganar dinero siendo honesto.
- No hay que llevar traje para ser formal.
Aquí y ahora, en España nada menos que el 25% de las personas son consumidores rebeldes, según el estudio Mikroscopia 2015, que consultó a más de 8.400 personas.
¿Qué es un consumidor rebelde?
Es el se rebela porque la crisis le ha puesto en una situación muy dura, pero también quien no ha sido tan afectado por la crisis pero se solidariza con las víctimas y se rebela contra la situación que vive el país.
Así lo explica Belén Barreiro, expresidenta del CIS y directora de MyWord, la empresa autora del estudio, quien sostiene que el consumidor rebelde es el fenómeno de Podemos aplicado al mercado.
Sin embargo, como ya vimos con Google o Uber este fenómeno no es solo nacional, también se da en otros países y tiene importantes repercusiones.
En Nueva York han bajado los precios de los hoteles. ¿La razón? Según los analistas de Credit Suisse hay más de una: hay más habitaciones, el tiempo es malo, el euro ha bajado y Airbnb. Sí Airbnb, el servicio que con el slogan nuestra casa es tu casa pone en contacto a viajeros y gente que los recibe en sus casas.
Si eres rebelde dilo
Por todo ello y mucho más es hora de que las empresas que nos consideramos rebeldes lo digamos claramente.
Nosotros en Churba & Portillo nos consideramos rebeldes porque siempre hemos apostado por el medio ambiente, por el uso responsable del papel, por el software libre y porque hacemos todo lo que podemos por el bienestar de las personas y para proteger a nuestro planeta.
Y creemos que estas son también razones para contratarnos.
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No se yo si el concepto rebelde sería el más adecuado, yo veo más una actitud esquizofrénica en la sociedad -y por extensión en las empresas- Afirmamos que tenemos unos valores éticos y morales, y a la hora de la verdad, nuestras acciones suelen ir en dirección contraria -a excepción de algunos likes en Facebook-
Creo que el consumidor está más perdido que nunca y es más víctima de esta nueva forma de comunicar, dónde no hay tiempo para evaluar si alguien es rebelde o lo parece, dónde nuestro propio bienestar pasa por encima del bienestar común.
Con lo que ser rebelde no creo que sea un hecho diferencia, sino si esta rebeldía se alinea con nuestros propios principios -sean ambos ciertos o no- y si son lo suficientemente potentes como concepto para que gastemos más de lo que cuesta el servicio porque realmente estamos comprometidos.
En fin, no se si me he explicado.
No se si rebeldes o no, pero diferenciaros y llegar a esa gente con intereses afines si que es algo que hacéis muy bien. Y esa es una apuesta ganadora.
Saludos.
Muchas gracias por ofrecernos tu opinión.
Creo que tu análisis incluye diferentes aspectos y me parece que la esquizofrenia de la que hablas se ve claramente en las respuestas de las encuestas, cuando la gente no responde lo que piensa, sino lo que cree que se espera o lo que considera que debería decir para quedar bien.
También hay, como tú dices, gente muy perdida, que no sabe por donde salir.
Y hay una parte de los consumidores, uno de cada cuatro según el estudio que citamos, que aprecia unos valores rebeldes.
¿Significa esto que esa gente está dispuesta a pagar más a una empresa o por un producto que comparte sus valores?
No necesariamente. Precisamente, en Churba & Portillo no esperamos que nos paguen más por preocuparnos por nuestro planeta y sus habitantes, al contrario, por ejemplo a los miembros de ANSE, una ONG dedicada a la conservación de la Naturaleza, les ofrecemos descuentos especiales.
Gracias, RaMGoN nos has alegrado el día.
Un abrazo,