De las contraseñas depende buena parte de la seguridad de tu empresa, porque abren la puerta de entrada a tu ordenador, a tus cuentas bancarias, a tu web, a tus correos electrónicos, a tus bases de datos y a muchas otras cosas importantes.
Por eso, merece la pena que les dediques un poco de atención, porque haciéndolo te ahorrarás muchos problemas.