Philippe Starck es un diseñador industrial francés reconocido mundialmente.
Este parisino autodidacta es capaz de crear un exprimidor, el Juicy Salif, considerado como una joya por los coleccionistas; renovar los apartamentos privados del Presidente francés François Mitterand; construir el barco La Fiamma para la empresa Asahi o diseñar los interiores del Teatriz, de Madrid. Y también de crear su propia empresa, Starck Product.
En una interesantísima entrevista realizada por Borja Hermoso para El País Semanal explica:
toda esa dimensión económica de la creatividad de la que hablaba antes tiene todavía muchísima más importancia en tiempos de crisis. Y ahí existe algo que es vital, y que yo llamo la posesión de la diferencia. Para cualquier empresa, saber ser diferente de los demás es vital… pero en tiempos de crisis eso se convierte en un bien extraordinario.
Starck apuesta por la diferencia y gana.
La diferenciación es el secreto del éxito que Starck comparte con otros triunfadores, como Swatch o Vosges Haut-Chocolat, por poner dos ejemplos completamente diferentes.
Foto: Philippe Starck durante su presentación en Le Web 07 (estelle_dumout/Creative Commons).
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Amigo Churba y Portillo desde Huamachuco-Perú le deseo un 2009 lleno logros y realizaciones. Un abrazo. Lorenzo.
Gracias y muchas felicidades, Lorenzo.