Conseguir que los tornados se conviertan en negocio está solo al alcance de unos pocos, pero expertos metereólogos y experimentados cazadores de tornados han encontrado un nicho de mercado pequeño pero interesante.
Organizan de tres a diez tours por temporada que cuestan entre unos 2.300 y 3.800€ por persona, a los que hay que sumar el alojamiento y la comida.
Cada tour dura una o dos semanas durante las cuales guía y turistas se mueven en furgonetas por el Callejón de los Tornados o Tornado Alley, una zona donde estos fenómenos son frecuentes.
Y tienen tanto éxito que hay que reservar con un año de antelación.
La mitad de estos turistas vive fuera de los Estados Unidos, un tercio son europeos y el 11% llega desde Australia.
Son datos de un estudio de la Universidad de Missouri que no revela el número de turistas que llega al Medio Oeste para ver tornados, aunque asegura que gracias al cine y la televisión cada vez son más, que son de mediana edad, van solos, tienen un alto nivel educativo y son ricos.
Y aunque no todos consiguen ver un tornado, la mayoría se muestra satisfecha con la experiencia y dispuesta a repetir.
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esta muy bueno poder tener acceso a una experiencia extrema como esta. Lamentablemente no soy rico pero sueño con ir a ver tornados, aunque sea sentir esa adrenalina de ver esos gigantes que llegan hasta el cielo y tocan el suelo y ver ese temible poder, tengo una gran almiracion por este fenomeno natural, espero que la empresa siga hasta que yo tengo un buen trabajo que me coste este maravilloso viaje.
Saludos a aquellos valientes que disfrutan su vida haciendo estas cosas. La vida es una sola asi que hay que vivirla a pleno, Saludos camaradas