A nadie se le ocurre llevarse un coche simplemente porque esté en la calle. Aunque sea bonito, tenga las puertas abiertas y las llaves puestas, todo el mundo sabe que tiene un dueño y salvo algunos ladrones que saben a lo que se arriesgan, todos respetamos su derecho a la propiedad. Sin embargo, en Internet no ocurre lo mismo.
A menudo nos encontramos con empresas que usan en sus sitios webs fotos, textos u otros materiales porque estaban en Internet sin fijarse siquiera a quien pertenecían o si podían efectivamente usarlos.
Porque que algo esté en Internet no significa necesariamente que esté a disposición de todo el mundo o que no tenga dueño.
Usar en la web de tu empresa fotos u otros materiales sin autorización puede tener desagradables consecuencias porque puede vulnerar los derechos de otras personas, empresas o instituciones.
Así que, antes de usar algo que está en Internet, entérate bien bajo qué condiciones ha sido publicado y si realmente puedes usarlo o no.
Te evitarás problemas.
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metáfora FAIL
Muy interesante tu fundamentado punto de vista, pepe.