Impresionante el testimonio de Antonio Gallardo aparecido en El País: un pequeño empresario que cuenta cómo le niegan créditos, al mismo tiempo que el dinero que el Estado le debe -la devolución del IVA-, le permitiría mantener su empresa y los puestos de trabajo.
Acaba diciendo:
No pido un regalo, ni siquiera un préstamo, sólo lo que es mío: mi pan y el de mis trabajadores.
¿Te gusta este artículo?
Entonces suscríbete a nuestro boletín y recibirás gratis información premium para tu negocio y ofertas exclusivas.
No pido un regalo, ni siquiera un préstamo, sólo lo que es mío: mi pan y el de mis trabajadores.realmente terrible, saludos desde Israel.