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Google ha creado un test que en un instante te permite saber si tu web permite la correcta navegación con teléfonos móviles y tablets. Si lo pasas, los usuarios del buscador lo sabrán y asà podrás conseguir más visitas desde estos dispositivos.
Dar un libro gratis puede ser una inversión muy rentable para tu negocio aunque en principio no te lo parezca. Descubre estas diez razones para hacerlo: Darte a conocer: un buen libro te ayudará a … Leer más
Si tu web no está optimizada para dispositivos móviles, ya estás tardando en actualizarla, porque ahora Google se lo dirá a todo el mundo en sus resultados de búsqueda.
Ya está disponible el nuevo sistema operativo para los dispositivos móviles de Apple, iOS 8, lo que hará a que el buscador DuckDuckGo cobre importancia para los negocios online. ¿Por qué?
A veces los constantes cambios en el algoritmo, los requerimientos y recomendaciones de Google pueden hacernos olvidar que la verdadera razón de ser de todas las empresas son sus clientes y que, por lo tanto, satisfacer sus necesidades es lo primero.
Hace ya muchos años, en 1996, Bill Gates proclamó que el contenido es el rey y hasta hoy, todo el mundo dice creer a pie juntillas en esta afirmación. Porque de poco sirve un gran diseño web si no hay un contenido que atraiga a buscadores y visitantes y transforme a estos en clientes.
Sin embargo, en demasiados casos el contenido más parece la cenicienta que el rey de la web.
En 1996 Bill Gates lo coronó y hasta el momento nadie le ha disputado el trono ni se le conocen herederos, sin embargo la mayorÃa ni siquiera lo tiene en cuenta.
¿Sabes de quién hablo?
¡Pero qué buena, qué guapa y que simpática es mi web! ¡Muac, muac, muac! dijo el emprendedor, dejando la pantalla pringosa de tanto besarla. Y continuó: lástima que Google te tenga manÃa, porque sino estarÃamos forrados.
SÃ, aquel hombre se comportaba con su web como esos padres que consideran que sus hijos son un dechado de virtudes, cuando son insoportables, y que creen que sus pobres maestros y profesores les tienen manÃa, cuando aguantarlos es una proeza.
